y la razón dispara las banderas...
Intermitentes, color fugaz, un dejo amargo, a tu paso, a tu paso
Te veo atravesada entre mis ojos, libelula,
y vuelas trayectorias que algún día te enseñé,
viejas rutas, nuevos versos, más mentiras
Tus alas, fuego negro las consume
La llama se alzó, más allá de tu sombra
El aire a tu paso se cortó y secó tus heridas
Un halo de muerte
El final se huele fresco,
costumbres incendiadas aún sueltan su
asfixiante humo,
tu aroma ha de perderse en tu vuelo al inframundo
En un vuelo fugaz, abrazado a un fantasma,
esta sed de ti, de verte volar, no se irá.